Fortaler el Bazo y liberar el estancamiento del Hígado, claves para la fibromialgia
Desde la perspectiva de la Medicina Tradicional China (MTC), la fibromialgia se comprende como un desequilibrio energético que involucra un estancamiento del Qi del Hígado y de la Vesícula biliar, así como una debilidad en el Bazo.
Según la MTC, el Bazo, junto con el Estómago, está asociado al elemento Tierra y desempeña un papel esencial en la transformación de los alimentos en energía y sangre. Esta transformación es crucial para nutrir los órganos y tejidos del cuerpo, en particular los músculos. Cuando hay una deficiencia en la energía del Bazo, puede resultar en debilidad muscular y fatiga, que son síntomas comunes en la fibromialgia.
Por otro lado, la Vesícula biliar tiene un rol importante en la movilidad y la elasticidad del cuerpo. Cuando la energía de la Vesícula biliar se estanca, puede llevar a movimientos dolorosos y rigidez en las articulaciones, manifestaciones típicas de la fibromialgia como el dolor articular y la rigidez generalizada. Además, el Qi del Hígado, que se encarga de la libre circulación del Qi y la sangre en el cuerpo, también puede verse afectado, exacerbando los síntomas.
El estrés emocional, la ansiedad y las preocupaciones excesivas son factores que contribuyen al estancamiento del Qi del Hígado, lo cual a su vez debilita aún más al Bazo. Este desequilibrio emocional y metabólico crea un círculo vicioso que perpetúa los síntomas de la fibromialgia.