Retención de Líquidos en Verano
La retención de líquidos en verano es un fenómeno común que puede explicarse desde la perspectiva de la Medicina Tradicional China (MTC) donde el edema o acumulación excesiva de líquidos se ve como una manifestación de desequilibrios internos que afectan a la capacidad del cuerpo para metabolizar y distribuir líquidos correctamente. Este desequilibrio suele involucrar a varios órganos clave: el Pulmón, el Bazo, los Riñones/Vejiga y el Triple Recalentador.
Factores que Contribuyen a la Retención de Líquidos en Verano
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Pulmón tiene la función de dispersar y hacer descender los líquidos corporales hacia el Riñón. En verano, la exposición al viento externo, especialmente el viento-frío proveniente del aire acondicionado, puede afectar negativamente esta función. Esto se debe a que el viento-frío bloquea la capacidad del Pulmón para movilizar líquidos de manera eficiente, causando retención de líquidos y edema en la parte superior del cuerpo, como en la cabeza, cara y manos.
- El Bazo es responsable de transformar y transportar los líquidos provenientes de la alimentación, pero durante el verano, el calor y la humedad pueden debilitar su función. Además, el consumo de alimentos fríos y crudos, como ensaladas, bebidas heladas, o productos lácteos, que enfrían el Bazo, reduce aún más su capacidad para gestionar líquidos. Como resultado, es común experimentar hinchazón, especialmente en el abdomen.
- Los Riñones, junto con la Vejiga, juegan un papel crucial en la eliminación del exceso de agua del cuerpo. En la MTC, el Riñón se considera como la «batería» interna que alimenta nuestras reservas de energía (Yang Qi). El agotamiento de esta energía, ya sea por estrés excesivo, actividad sexual intensa, o enfermedades crónicas, afecta la capacidad de la Vejiga para excretar líquidos, lo que resulta en edema, particularmente en las piernas.
- El Triple Recalentador coordinacia y regula los tres centros del cuerpo: superior, medio e inferior que están asociados con la distribución y circulación de líquidos. Un desequilibrio en el Triple Recalentador puede dificultar la movilización y eliminación adecuada de líquidos, contribuyendo a la retención.
- La acumulación de «patógenos» como Viento, Humedad y Calor en el cuerpo también puede influir en la retención de líquidos. En el verano, la combinación de calor externo e interno, junto con la humedad ambiental, puede hacer que estos patógenos afecten al Pulmón y Bazo, llevando a una acumulación de líquidos que se manifiesta como edema generalizado.
Prevención y Tratamiento
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Evitar el consumo excesivo de alimentos fríos, crudos o de difícil digestión, como los lácteos, ya que pueden debilitar el Bazo. En su lugar, optar por comidas tibias y bien cocidas que favorezcan la digestión y la función del Bazo.
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Evitar la exposición directa al aire acondicionado o cambios bruscos de temperatura que puedan afectar al Pulmón y, por ende, la circulación de líquidos.
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Mantener una actividad física moderada para apoyar la circulación y la función renal, pero sin agotarse en exceso.
En resumen, la retención de líquidos en verano es un fenómeno multifactorial que involucra desequilibrios en la función de varios órganos clave. Abordar estos desequilibrios mediante cambios en la dieta, protección contra el clima y terapias complementarias puede ser efectivo para prevenir y tratar esta condición.
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